Hace unas semanas fallé a dos memes seriéfilos de esos que tanto me gustan seguir. El primero llamado "Las series más sobrevaloradas", que llegaba desde Freak's City y consistía en mencionar esas series que pensamos que están sobrevaloradas, o como dijo Macguffin, "sobredimensionadas". El segundo llevaba por nombre, "Y si te he visto... no me acuerdo", lanzado desde 4:3/16:9 y en el que había que citar las series que habías abandonado a lo largo de esta campaña. Entre que no se me ocurrieron series para el primero y que no soy mucho de abandonar el barco, no me pude poner manos a la obra para seguirlos como a mí me hubiera gustado. Por suerte, hace unos días, nuevamente Freak's City volvió a lanzar un meme, "Tú antes molabas, serie". Este no me lo pierdo, pues el asunto reside en hablar de las series que antes nos gustaban y ahora no (lo hacen tanto). En mi caso, no he tenido que darle muchas vueltas al coco para encontrarme con unos cuantos ejemplos que rápidamente paso a destacar:

Los Simpson: Llevaba muchísimo tiempo deseando encontrar la inspiración necesaria para hablar de la situación actual en la que se encuentra la que siempre recordaré como una de las series de mi vida. Día que como en casa, día que lo hago acompañado de los habitantes amarillos de Springfield. Así llevo haciéndolo desde que tengo uso de la razón y da igual que Antena 3 emita por decimonovena vez el capítulo que sea, si es de la época dorada de la serie, lo veo y casi lo disfruto como si fuera la primera vez. En cambio, si toca uno de las últimas temporadas (y no tan últimas), la cosa cambia... radicalmente. Es como estar viendo una especie de versión 2.0. de la misma serie, pero está claro y creo que esta opinión es generalizada, que Los Simpson de ahora son simplemente una caricatura de lo que fueron en su momento. Sobre este caso, sólo me queda plantear una pregunta: ¿Los Simpson tienen o llegarán a tener fecha de caducidad algún día?.

24: No quería echar más leña al fuego, pero es innegable que ya no disfruto con 24 como lo hacía no hace tanto. Esta octava temporada, que a la postre va a resultar ser la última, ha sido una completa decepción, por mucho que ahora parezca estar despegando y ofreciendo las características dosis de 24 que durante toda su primera mitad, estuve esperando sin recibir nada a cambio. Sólo espero que las cosas sigan como en los últimos capítulos, para por lo menos poder disfrutar de una recta final (ahora mismo aspostaría por ello a falta de tan sólo 4 capítulos) que esté a la altura del personaje de Jack Bauer y de esta serie que me ha hecho pasar algunos de los mejores momentos seriéfilos que uno se pueda llegar a imaginar. Tenía que incluirla aquí aunque fuera sólo porque ya no espero los capítulos con las mismas ganas locas de antes y eso es algo bastante preocupante cuando se está hablando de la serie adictiva por excelencia. En el recuerdo siempre se quedarán aquellos maratones que me pegaba con las aventuras (y desventuras) de Jack Bauer...

Cómo conocí a vuestra madre: Está en boca de prácticamente todos, HIMYM ya no es la que era. La quinta temporada arrancó fatal, llegando al punto de hacerme meditar si valía la pena seguir con ella (la deceoción de la cuarta entrega aún estaba demasiado reciente) pero por suerte se ha puesto las pilas y aunque todavía se la sigue jugando ofreciendo capítulos de esos que olvidas a los pocos segundos de haberlos acabado, me ha vuelto a mostrar síntomas de poder llegar a ser la misma de antes. Muchas veces, y esto es aplicable a prácticamente todas las sitcoms, creo que nuestra percepción hacia este tipo de series depende mucho de si las vemos a nuestro ritmo o al americano (un capítulo a la semana... y si eso), pues los fallos y las decepciones se magnifican excesivamente en el segundo caso. Quizás si hubiera hecho desde la tercera temporada, lo mismo que hice con las dos primeras (verlas del tirón), ahora no estaría diciendo que CCAVM peca de una excesiva irregularidad... o sí, quien sabe. Lo que está claro es que hace mucho tiempo que no suelto un buen "legendary" y eso es señal de que ya no me lo paso como antes con la pandilla del McLarens.

Los Tudor: El caso de esta serie es diferente al del resto, pero hay varias razones por las que he decidido incluirla en esta peculiar lista. Para empezar, hace ya unos meses que vi su tercera temporada, la cual me gustó pero no lo suficiente como para dedicarle unas cuantas líneas por aquí, a diferencia de lo que hice en su momento con las dos primeras entregas, las cuales me gustaron bastante más, pese a que considero que todas ellas tienen más o menos la misma calidad. Aparte de que las dos primeras tuvieran 10 capítulos cada una, mientras la tercera tan sólo 8, lo que diferencia a la última de las anteriores, es que pocos personajes de los que comenzaron la serie aún seguían por ella (la historia es la historia...), a lo que habría que añadir que todas las tramas se desarrollaron con demasiada precipitación. Dando como resultado que en menos capítulos, diera tiempo a más cosas que en las dos campañas anteriores juntas, algo que difícilmente puede ser sinónimo de algo positivo. Desde que se fijó que la cuarta temporada sería la última, era evidente que en Los Tudor se iba a empezar a pisar el acelerador, pero en las series como en casi todo en esta vida, las prisas nunca fueron buenas. La temporada final se está emitiendo actualmente en Showtime, pero estoy reservándola para verla del tirón, con la esperanza de que Los Tudor vuelven a engatusarme como lo hicieron en su momento, y si puede ser ofreciendo un cierre digno, mejor que mejor.

Smallville: Siempre suele aparecer en todas mis listas negras, pero aún así parece que nunca termino por abandonarla. En realidad, esta vez llevaré cosa de 6 o 7 capítulos pendientes, por no decir que gran parte de lo que he visto de su novena temporada lo he tenido que hacer pasándolo hacia adelante, por lo que algunos podrían denominar esta situación como de abandono absoluto. Smallville nunca ha sido una buena serie, algo que se sabe incluso sin haber visto un minuto de la misma, pero es la clásica que puedes llegar a considerar un placer culpable. Su baza princiapl residía en unas tramas principales que llegaban a resultar bastantes interesantes y eso hacía que mereciera la pena seguir con ella temporada tras temporada. Esto era en otros tiempos, ya que desde hace dos o tres años la situación ha cambiado, a lo que habría que añadir las tropecientas variaciones que ha sufrido la serie tanto en el equipo técnico como en el propio elenco de actores y actrices. A veces pienso que la serie sigue siendo la misma, con las mismas virtudes y los mismos defectos, y el que ha cambiado soy yo que ya no tolera seguir tragando bazofia de ese calibre. Lo que tengo claro es que si finalmente decido enviarla al cajón de las olvidadas, espero escribir sobre ello cuando llegue el momento si me entra la inspiración, pues es lo mínimo que puedo hacer después de haber soportado a Clark Kent y el resto de la pandilla durante nueve temporadas, que se dice pronto...

Podría haber añadido alguna que otra más que puede no estar pasando por su mejor momento, pero he optado por incluir sólo a algunas de mis series clásicas y que en los últimos tiempos han bajado unos cuantos puestos en mi ranking personal. Quien las ha visto y quien las ve...