La Segunda de Massachusetts recomienda seguir leyendo sólo a aquellos que hayan visto el 1x10 “Eight Hours” y conozcan de primera mano las sorpresas (no son muchas) que ha deparado la recta final de la primera temporada de ‘Falling Skies’. El que avisa, no es Skitter ¡Spoilers!
Esta primera entrega la puedo dividir sin problemas en dos partes, cuyo punto de inflexión es el rescate de Ben, el hijo mediano de Tom Mason, el héroe de la función. Antes, poco o nada fue lo que me interesó, pese a que lo visto en estos primeros cinco capítulos resultó ser más o menos entretenido, aunque con demasiados “peros”. Por aquel entonces mentiría si dijera que por mi mente no pasó mandar a la serie al mismo sitio dónde acabaron no hace mucho el remake de ‘V’ o ‘The Event’, las últimas de extraterrestres con las que me había atrevido a probar suerte. Es lo que tiene echar la mirada atrás y darte cuenta que de esos episodios resulta mucho más sencillo recordar cosas negativas, al estilo de ver cómo el que presumía ser un hombre sin escrúpulos (Pope) acababa convirtiéndose en el cocinero del rebaño o presenciar un bochornoso espectáculo como la escena final del 1x04 “Grace”, con toda la Segunda rezando con Lourditas como maestra de ceremonias. Es más, esta tanda de capítulos casi llegué a tomármela a cachondeo, por muchas dosis de drama gratuito que fueran servidas en cada capítulo.
De todas maneras, no sería la primera vez que una serie empieza francamente mal y poco a poco termina remontando. No es el caso de ‘Falling Skies’, al menos no todavía, pero tengo que reconocer que los últimos capítulos no me han dado esa pereza que sí me dieron los anteriores. El doble “Sanctuary” fue la primera piedra que la serie supo poner correctamente. Otra vez pecó de tirar de un recurso clásico en este tipo de historias, donde un grupo de humanos "buenos" termina “trabajando” para los invasores "malos" pensando sólo en sí mismos, pero la segunda parte de esta historia me pareció bien llevada, y sobre todo, rematada. La primera en cambio me pareció tan previsible (en el minuto 5 del capítulo ya era demasiado cantoso que habría gato encerrado) que una vez más me hizo replantearme si realmente merecía la pena seguir con este puedo, pero no quiero llamado 'Falling Skies'. A partir de aquí, entramos en la recta final con el 1x08 “What Hides Beneath”, el episodio que ha terminado por ser mi favorito de la campaña y eso que tampoco fue nada especial. Al menos consiguió que esperara con ciertas ganas la doble season finale.
Una lástima que la season finale no siguiera con esa modesta línea ascendente (se me hizo demasiado larga), pero aún así, el resultado fue por lo menos para otorgarle un suficiente raspado. Me han gustado y sorprendido (algo que parecía impensable con esta serie) las revelaciones relacionadas con los invasores. Si seguí descargándola cada lunes, creo que fue porque al fin y al cabo quería saber más sobre ellos y sus planes. De lo segundo no hay novedades, pero de lo primero sí, y la verdad, bastante interesantes. Que los Skitters lleven captadores, junto a que Ben y Rick estén convirtiéndose en ellos y que nos hayan presentado a unos nuevos seres (parecen ser las mentes maestras detrás de la invasión), cambia casi por completo el panorama. Si hablo de giros y sorpresas, el que merece una mayor atención es el cliffhanger con el que se ha despedido la temporada. Me ha pillado con los pantalones bajados, y aunque a la escena le ha faltado fuerza dramática (por decirlo de alguna manera), me ha dejado muy buen sabor de boca. No lo he visto venir, y para colmo, es uno de esos finales que te dejan sin poder imaginar cómo continuará todo.
¿Para qué quieren a Tom? ¿Por qué no se han llevado a Weaver también? ¿Le veremos conviviendo con el enemigo? ¿Le contarán al profesor de historia sus planes de invasión? ¿Tendrá que ir la Segunda a recatarle? Son muchas las puertas que se pueden abrir a partir de este momento, pero a saber cuál eligen los guionistas. Para descubrirlo, hay que esperar hasta el verano que viene. Con este cliffhanger, ‘Falling Skies’ se ha ganado que vea la season premiere de su seguna temporada (luego ya veremos...). Dicho todo lo medianamente bueno que tenía que decir, quiero aclarar que por mucho que se haya ofrecido una suculenta ración de giros y revelaciones, la serie sigue pareciéndome un producto bastante flojo y prescindible. Que de todo los personajes, sólo salve a Tom... y ahora también a Ben (cuando hice el "primer contacto" el personaje aún no había aparecido nada más que de oídas), me parece un lastre que a la larga no creo que pueda superar. La única solución que veo a este problema, es que los Skitters se pongan las pilas y empiecen a hacer eso que se presupone (no lo parece) que se les da tan bien: exterminar humanos.
Con un poco de suerte, así el elenco de actores y actrices podría renovarse, ya que el que hay ahora mismo es otro de los puntos que más me escuecen. No quiero extenderme más de la cuenta, pero así a groso modo, apuntar que me parece que Moon Bloodgood (la enfermera Anne) tiene un excesivo protagonismo y sólo porque es ella (más allá de la tensión sexual ya resuelta con Tom). Por muy guapa que me parezca Sarah Carter (Margaret), su mirada acero azul al más puro estilo 'Zoolander' me supera, casi tanto como el careto de Rick (y de otro muchos secundarios y extras). En el otro lado, Hal (tanto el personaje como Drew Mory) ha mejorado notablemente con el paso de los capítulos pese a que ande con las hormonas descontroladas (¿no hay más adolescentes para que todas las jovenzuelas tengan que fijarse en él?), Colin Cunnigham me pega mucho como Pope aunque los guionistas dan la sensación de no saber qué hacer con él, a Connor Jesusp (Ben) le considero el gran descubrimiento, mientras que Will Patton por fin empieza a dar síntomas de querer demostrar que es un veterano en esto de la actuación. Por cierto, es de agradecer que a Lourditas (la ultrareligiosa) la sigan dejando las frases justas y necesarias.
En definitiva, que son muchas cosas las que me siguen chirriando, pero partiendo de la base de que se trata de una serie en la que se supone que se ha producido una invasión alienígena a grandísima escala y en la que los supervivientes andan a la luz del día como si estuvieran en el patio del colegio, queda claro que intentar transmitir cierto realismo (al igual que otras muchas cosas) no preocupa en exceso. En el último capítulo, viendo a las naves alienígenas regresar a la "planta petrolífera", no podía dejar de pensar que de dónde demonios habían salido, pues en estos 10 capítulos han debido dejarse ver un par de ellas a lo sumo. De todas maneras, no es algo que me sorprenda demasiado, pues estos extraterrestres son un poco tacaños. Hasta para salir a patrullar lo hacen en "modo ahorro", sino no entiendo que siempre vaya un Mech y un sólo Skitter cuando podrían ser cientos de ellos. Claro que pensándolo bien, si hicieran eso es muy probable que más que una serie de por lo menos dos temporadas (TNT la renovó al poco de estrenarse), 'Falling Skies' no daría para más que una tv movie de esas que ven las madres un domingo a las cuatro de la tarde.
Si de algo me ha servido ver la primera temporada de 'Falling Skies' es para rebajar casi a cero mis expectativas de cara al estreno de 'Terra Nova', la otra serie de ciencia ficción (cambiando alienígenas por dinosaurios) producida por Steven Spielberg y que el 26 de septiembre aterrizará en las pantallas de FOX. ¿Otra serie de corte familiar o podemos permitirnos esperar algo distinto?