Este año es el año en que vamos a tener que modificar definitivamente una de las frases más usadas por estas tierras, pasando del "internet ha modificado la forma de ver la televisión" a
"internet ha modificado la forma de ver y emitir la televisión". Primero fueron
las webseries, un género que está viviendo su particular edad dorada a nivel mundial y que en España se ha terminado por convertir en una lanzadera casi indispensable para cualquiera que quiera iniciarse (véanse los estudiantes y licenciados en comunicación audiovisual) en la producción de ficción. Después llegaron
las plataformas de contenido online que ponen a disposición de su base de clientes, series y películas en
streaming a cambio de una pequeña cuota mensual, como son
Netflix y Hulu. En este 2012, vamos a vivir (aunque el origen de todo sea en Estados Unidos, nos terminará "afectando" a todos indirectamente) el que seguramente es el paso más importante en esta evolución sobre la forma de ver y emitir contenidos televisivos fuera de los medios tradicionales. Este paso se va a producir gracias precisamente a las plataformas online, pues una vez se anunció que empezarían a producir sus propios contenidos, es ahora cuando podremos empezar a ver y comprobar los resultados, convirtiéndose así en las nuevas jugadoras de la televisión americana.
Si hay algo que siempre se ha achacado a las webseries es que por lo general pecan de ser productos menores, debido a que cuentan con un presupuesto infinitamente inferior al de cualquier serie del mundo que se emite por televisión. Un hándicap que se suele intentar contrarrestar con la ilusión de los autores y unas grandes dosis de originalidad, todo sea dicho. Hay excepciones (en forma de superproducciones online), pero se pueden contar con los dedos de una mano, y además, cuando las hay casi siempre se trata de productos nacidos con la ayuda de grandes marcas que han encontrado en esta modalidad una forma original y llamativa de publicitarse, pese a que la mayoría todavía sigue sin tener muy claro en que consiste esto de la
internete. Aquí reside
la principal diferencia entre las webseries y el nuevo modelo de negocio relacionado con la inmersión en el campo de la producción propia que pretenden llevar a cabo empresas como Netflix, Hulu o Yahoo!, pues estas
pretenden entrar en el sector compitiendo de tú a tú con las grandes majors hollywoodienses. El dinero de internet contra el de la televisión tradicional.
Haber escrito la palabra "negocio" más veces que en casi cuatro años de Carrusel, creo que es la señal que necesitaba para empezar a centrarme en lo que realmente importa aquí: las series de la discordia, especiaelmente los proyectos que llegarán con
el sello de Netflix, la pionera en toda esta historia cuando anunció '
House of Cards'. Curiosamente, no será su particular joya de la corona la primera en aterrizar, sino que será '
Lilyhammer', protagonizada por todo un "Soprano" como es
Steven Van Zandt (Silvio Dante para los amigos de '
Los Soprano'). En esta serie se pondrá en la piel de Frank "The Fixer" Tagliano, un mafioso de Nueva York que entrará en el programa de protección de testigos tras delatar a su jefe (no, aquí no es Tony). De esta forma acabará con sus huesos (helados) en Lillehammer, una localidad noruega en la que se llevaron a cabo los juegos olímpicos de invierno de 1994. Su intencion es llegar a un paraíso invernal y relajado, lejos del ajetreo de la Gran Manzana y de sus ex-compañeros mafiosos. Por supuesto, su nueva vida no será tan sencilla como espera. 'Lilyhammer' es el único proyecto de Netflix con fecha de estreno, el
6 de febrero, y su primera temporada se compondrá de 8 capítulos.
Aquí os dejo el trailer.
A lo largo del 2012 irán estrenándose el resto de producciones, entre las que se encuentra la nueva temporada de '
Arrested Development', de la que
he ido comentando todo lo que ha ido saliendo. Además del esperado regreso de la familia Bluth, Netflix está preparando otra comedia, '
Orange is the New Black', la nueva serie de
Jenji Kohan (creadora de '
Weeds') sobre una mujer encarcelada en una prisión de mínima seguridad. Cambiando radicalmente de registro, la plataforma de contenidos online también está detrás de '
Hemlock Grove', serie producida por
Eli Roth (uno de los niños mimados de
Quentin Tarantino y responsable de la saga '
Hostel'), siendo ésta su primera incursión en el terreno televisivo. Basada en la novela homónima de Brian McGreavy, sobre esta serie de suspense y terror (prepararos porque el éxito de '
American Horror Story' no ha pasado desapercibido para nadie en la industria) sólo se sabe que tendrá una primera temporada de 13 capítulos y que su sinopsis (por llamarla de alguna manera) viene a decir algo así como que "ambientada en el marco de nuestros mitos más oscuros, engaños adolescentes y rumores sobre licantropía, esta serie reimagina todo lo que significa ser un monstruo reflejándolo en la lucha por ser humano".
Esto y nada, casi es lo mismo. Lo que no cambia que el proyecto suene lo suficientemente interesante como para seguirle la pista hasta que se estrene.
Para el final del repaso a las producciones que está preparando Netflix, me he dejado a la que debía ser su carta de presentación, pero que finalmente se tendrá que conformar con la etiqueta de joya de la corona. '
House of Cards' colocó a la plataforma de contenidos en el mapa de la industria desde el mismo momento en que se anunció. Es lo que tiene decir que
Kevin Spacey la protagonizará y que
David Fincher hará las funciones de productor ejecutivo (además de dirigir el capítulo piloto) en esta serie de la que se han encargado (antes de estrenarse) dos temporadas de 13 capítulos cada una, de las que se rumorea que le costarán a la compañía la nada despreciable cifra de 100 millones de dólares. Señales de que Netflix apuesta muy fuerte con este proyecto. Más allá de los nombres y las cifras, decir que 'House of Cards' es un thriller político, remake de una miniserie inglesa que fue emitida en 1990 en la BBC y que a su vez estaba basada en una novela de Michael Dobbs que se centraba en el jefe de equipo del Partido Conservador Británico en los últimos tiempos de la era de Margaret Thatcher en el poder. En la versión de Netflix, claramente la historia se ambientará en Estados Unidos y en la actualidad, donde Spacey hará de un ambicioso político.
Este nuevo modelo de negocio no es cosa exclusiva (aunque no lo parezca) de Netflix, pues
Hulu también tiene previsto estrenar próximamente su primera serie de factura propia. Una
comedia titulada '
Battleground' y que seguirá las aventuras y desventuras del equipo de la campaña electoral de un candidato al Senado de los Estados Unidos.
Toda la información sobre este proyecto la podéis encontrar en Vaya Tele. Por último, recientemente se ha anunciado que
Yahoo! también se suma a la fiesta y ha llegado a un acuerdo con la compañía de
Tom Hanks para producir su primera serie. Del proyecto sólo se sabe que será de
animación, que se compondrá de 20 capítulos (de 4 minutos) y que el señor Hanks además de hacer las de productor, también pondrá la voz del protagonista. Por ahora es lo único que se sabe, aparte de que está previsto para primavera.
Después de repasar por encima los proyectos que se traen entre manos Netflix, Hulu o Yahoo!,
son muchas las preguntas que me rondan la cabeza. Algunas son: ¿Estamos presenciando el inicio de una revolución en la forma de emitir contenidos exclusivos de televisión? ¿Seguirán más pronto que tarde otras compañías (Apple, Google...) los pasos de estas nuevas jugadoras? ¿Cómo y cuándo podremos ver (legalmente) estas series en España? Sea como sea, lo que está claro es que el consumo televisivo está cambiando e internet lleva tiempo teniendo mucho que decir.