Nunca pensé que llegaría a decir esto, pero por primera vez he temido que NBC diera a ‘Community’ con la guadaña de la cancelación. Entre tanto, su cuarta temporada ha sido la primera que no ha contado con el beneplácito general de su numerosa legión de seguidores. Los mismos que durante su primer curso no se cansaron de venderla como la sitcom que todo el mundo debería estar
viendo. Exactamente los mismos que con el paso del tiempo la han coronado como una de las mejores comedias de los últimos años y que han conseguido que sea considerada de culto. De ahí que este repentino cambio de tendencia me tenga como poco descolocado. Resulta que para una vez que acabo más que satisfecho con la serie, nadie más (o casi nadie) lo ha hecho. Por eso mismo empiezo a sentirme un poco bicho raro (o precisamente todo lo contrario) por ir siempre a contracorriente. Y es que tras años confesando que 'Community' no me parecía esa maravilla de la que la gran mayoría hablaba, ahora resulta que lo cool cool cool es decir que desde la salida (culebrón incluido) de Dan Harmon (el creador) ya no es la misma que era antes.
Le han caído tantos palos que no puedo ocultar mi incredulidad. Después de aceptar que quizás mi problema con 'Community' eran tan
simple como que no era para mí, llega la cuarta temporada y me gusta más que cualquiera de las tres anteriores.
Algo que hasta a mí mismo me ha pillado por sorpresa. Sin ser nada del otro mundo, y
sobre todo, sin tener un capítulo de esos que se te quedan grabados en
la memoria (tipo el de la batalla de paintball en la primera temporada o
el de las diferentes líneas temporales en la tercera), ha sido la que
mejor me ha entrado. La más regular. La única que he llevado casi al día y con ganas (de verdad) de ver el siguiente. Evidentemente, la lluvia de palos a esta temporada se ha traducido en que por primera vez las elevadas expectativas no hayan jugado en mi contra, sino justo lo contrario. Lo que confirma mi teoría sobre que estoy ante
uno de esos pocos casos en los que el hype probablemente me haya
impedido disfrutar como debería de una serie. Sea como sea, cuando por fin consigo hacerlo,
resulta que esta última tanda de capítulos no se merecen ningún tipo de reconocimiento por parte de los que saben de 'Community'. Espero que a nadie le parezca extraño que me encuentre tan confundido como
el personaje de Kevin-Chang.
Chang siempre ha sido el personaje con menos minutos, pero nunca ha dejado de ser mi favorito. Siendo el único que ha conseguido sacarme carcajadas en cada una de las cuatro temporadas. Desde sus comienzos como profesor de español (el Tigre Chino) hasta que regresa reconvertido como Kevin sufriendo de "Changnesia", los guionistas han demostrado saber explotar a Ken Jeong y el don que tiene para triunfar en esto de la comedia. Antes incluso que cualquiera de los protagonistas, Chang siempre ha sido mi particular gancho para seguir matriculándome curso tras curso en Greendale. En esta cuarta temporada, todo el tema de la "Changnesia" me ha parecido pura genialidad. Si no me equivo ha sido su primera trama de largo recorrido (más allá de sus intervenciones puntuales como villano) y tanto al personaje como al grupo de estudio le han sentado de maravilla. Un concepto el de la "Changenia", que perfectamente podría autodiagnosticarme a mí mismo, ya que en cierto modo es como si hubiera olvidado de golpe (gracias al desencanto entre los seguidores que antes la idolatraban) las elevadas expectativas con las que antes me tocaba afrontar (inevitablemente) cada episodio. Lo que me ha permitido ver la serie desde otra perspectiva.
Desde mi punto de vista creo que la serie no cambiado tanto (o directamente nada) tras la la marcha de Dan Harmon. Tanto que si no me hubiera enterado de su salida meses antes, lo que es viendo la temporada ni me habría percatado de este sonado relevo en la silla de showrunner. Como mucho me atrevería a decir que quizás ahora 'Community' es un poco más accesible para todos los públicos, pese a seguir manteniendo intactas sus señas de identidad como son el rumor referencial o la apuesta por hacer cosas diferentes (que algunas veces clava y otras muchas no). Y ahora que lo pienso, a lo mejor este intento por llegar a una audiencia más amplia es la razón de tanto malestar y decepción entre los seguidores de siempre. Para estos últimos, comentar que esta semana se viene rumoreando que el creador y Sony estarían en negociaciones para traer de vuelta a Harmon para la que previsiblemente sería la última temporada. Seguro que más de uno ya está como loco ante esta posibilidad y con ganas de volver a gritar a los cuatro vientos aquello de "six seasons and a movie". En mi caso, también pienso que el retorno de Harmon sería una gran noticia, pero de cara a esa quinta temporada (sin hueco en la parrilla otoñal de NBC), ahora mismo lo único que me preocupa es poder seguir autodiagnosticado con esta "Changenia" que tan bien me ha venido.
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Es interesante la forma de verlo, porque muchas veces me pregunté si realmente la diferencia que notaba en esta temporada era real o por la paranoia de la marcha de Dan Harmon y Chevy Chase (que, en este último caso, sí se nota por la poca importancia y las desapariciones del personaje).
Además, tampoco entiendo mucho la fijación con el "six seasons and a movie", precisamente por la propia idea de Community de tratarse de un curso de cuatro años...¿Qué gracia tendrá ahora Jeff visitando Greendale después de licenciarse?
Renaissance, sobre la marcha de Chevy Chase, no sé cómo lo han hecho para que el personaje de Pierce aparezca hasta el final de la temporada. Contaba con que su salida llegaría antes y se notaría mucho más.
Ahora que dices eso sobre el "six seasons and a movie", tu argumento tiene toda la lógica. Por cierto, también me estoy preguntando qué se van a inventar para traer a Jeff todas las semanas sin que se fuerce demasiado la situación.
¡Saludos!