Acabado el reinado de ‘Breaking Bad’, el testigo de mejor serie en emisión (por lo menos para este servidor) pasa a manos de ‘Boardwalk Empire’. Si todavía no has visto el final de la cuarta temporada de la joya de HBO, será mejor que no sigas leyendo. ¡Atención Spoilers!
Pese al piropo que acabó de lanzar a 'Boardwalk Empire', por primera vez vengo a decir que la serie no se ha superado a sí misma. La cuarta temporada no ha sido mejor que la tercera. Ha sido una temporada más sobria, menos
explosiva, lo que le ha impedido mantener la intensidad de los dos últimos
años. Creo que es algo que bien merece la pena destacar, pero que nadie se confunda a las primeras de cambio, ya que he babeado como siempre. La serie sigue tomándose muy en serio lo de hacer suyo aquello que dice que las series de televisión son el nuevo cine. Sin embargo, estos doce capítulos, al ser desarrollados con vistas a futuro (nunca
viene de más recordar que Terence Winter tiene un plan maestro de seis
temporadas), han cumplido más que nada con el propósito de plantar
tramas argumentales a largo plazo, lo que ha limitado los golpes de
efecto a corto. Por eso la temporada no ha sido tan intensa e impactante como sí fueron la segunda y la tercera, para que nos
entendamos. Esta vez no se
ha contado con una trama principal tan potente como fueron los
enfrentamientos de Nucky contra Jimmy Darmody, primero, y contra Gyp Rosetti,
después.
La introducción del Doctor Valentin Narcisse hacía presagiar
que volveríamos a presenciar una sucesión de acontecimientos que desembocarían en una nueva guerra. Muy inteligentemente, al final se
ha evitado repetir la misma fórmula. En cierto modo, hemos asistido a una, pero los bandos y el resultado final han sido diferentes. Diferentes porque, para empezar, por primera vez el foco de atención no iba a parar (en exclusiva) en Nucky. Enoch estaba más pendiente de otros asuntos. Ha seguido atendiendo sus negocios como no podía ser de otra manera, pero ha quedado un tanto desconectado del mundo criminal. Estaba más centrado en su vertiente familiar. Irónico que lo haga después de haber perdido a la suya. A Margaret y los niños. Las buenas intenciones del tío Nucky han terminado provocando un nuevo y apasionante enfrentamiento entre los hermanos Thompson. Reconozco que al principio de temporada me tenía muy descolocado hacia donde llevaría toda la trama de Willie, pero una vez más, esta serie demuestra que lo suyo es el encaje de bolillos. Muy acertada la manera de conectar el conflicto familiar del protagonista con la investigación contra su persona, llevada a cabo por el agente Knox en otra de las grandes tramas principales de la temporada. Una que más que acabar con la muerte de éste (no tengo elogios suficientes para describir la secuencia de su pelea con Eli), sólo acaba de comenzar. Y eso nos lleva a Hoover... y al otro motivo por el que pienso que la nueva guerra ha sido diferente a la de temporadas anteriores.
El Doctor Narcisse, al que toca considerar como "villano" del curso, no ha acabado enterrado en una fosa. No se ha escrito un punto y final a su participación, a diferencia de lo que sucedió con Darmody y Rosetti. Quizás porque en vez de "entenderse" con un Rey, se las ha visto con un Chalky White, al que por fin han dado rienda suelta a todo su potencial. Sus caras de póker se merecían un puesto en primera fila en este espectáculo que es 'Boardwalk Empire'. Un espectáculo al que ha acudido acompañado de una femme fatale con voz angelical y un puñal escondido en la falda... que al final fue a parar a la espalda de la bestia de Dunn Pursley. Otro gran secundario al que sumar al parte de bajas reseñables. Una lista donde también aparece Eddie Kessler, al que una borrachera con Ralph Capone acabaría subiéndole a un tren de culpa y remordimientos que le llevó a saltar literalmente por la ventana. Dejando a Nucky más solo si cabe. Porque Eddie al fin y al cabo era familia. Un detalle muy importante. Hablando del clan de los Capone, Al es otro al que por fin han subido la cuota de protagonismo. Un botín que se ganó con creces al final de la temporada anterior. Con Torrio fuera de combate, sólo queda frotarse las manos pensando en disfrutar del verdadero Al Capone. Y encima con un renovado Val Alden como mano ¿izquierda?. Una vez más, el "bueno" e "inofensivo" de George Muller ha vuelto a jugar con maestría el papel de roba escenas profesional.
En definitiva, la cuarta temporada ha servido para cerrar tramas que venían arrastrándose desde los comienzos de la serie, mientras que ha permitido dejar muchos frentes abiertos de cara a las que presumiblemente serían las dos últimas campañas de 'Boardwalk Empire'. Sobre todo tras la maravillosa season finale, "Farewell Daddy Blues", donde se han establecido numerosos emparejamientos que pueden dar mucho juego a futuro: Hoover/Narcisse, Van Alden/Eli, Capone/Van Alden, Margaret/Rothstein, etc. Seguramente el que menos llamativo me resulta es precisamente el de Nucky con Sally. Imagino que esta relación sólo acaba de dar sus primeros pasos. Como todo lo acontecido en Tampa. Un destino vacacional que junto a Harlem, han sido las dos grandes novedades en el mapa del crimen organizado dibujado por la serie. Pese a mantener siempre como eje a las tramas que tienen lugar en Atlantic City, sumar nuevas localizaciones se ha traducido en un aumento significativo en el número de subtramas principales. En mis cuentas, salen casi una docena. Por eso, nunca dejará de fascinarme cómo se las arreglan en la sala de guionistas (hace falta mucho talento) para que toda esa (en apariencia) inconexión inicial se vaya desvaneciendo a medida que todos los puntos van encajando. De la misma manera, me encanta que no tiemblen en ir sacrificando pesos pesados una vez ha llegado su hora. Tanto para un caso como para el otro, voy a utilizar el desenlace del clan Darmody para argumentar lo que digo.
En la cuarta temporada se ha escrito el último y definitivo capítulo de la trágica historia del clan Darmody. Una historia que comenzó con Nucky vendiendo su alma y entregando a una pequeña Gillian al Comodoro, y que acaba con un nuevo giro macabro para este personaje tan maravilloso como desgraciado y despreciable. Todo gracias a que Gillian no murió al final de la tercera temporada, tal y como pensé en su momento. Su trama ha vuelto a estar tan desprendida del resto como ya lo estuvo el año pasado, pero con la lección aprendida, sabía que hasta el último instante no se podría comprender cuál era el propósito final de su historia de redención. Una historia que la hizo soñar, con volver a conseguir la custodia de Tommy y convertirse en la esposa que siempre quiso ser, y volvía a tornarse en pesadilla cuando se destapaba que su ángel de la guardia era en realidad un detective privado con la única intención de meterla entre rejas por el asesinato del clon de su hijo. Una vez más se queda sola y vuelve a perderlo todo, pero esta vez ese no será su único castigo. Pero esa no es la razón por la que su nieto pasa a formar parte del clan de los Sagorsky. Si Tommy tiene nuevo hogar es gracias a que su ángel de la guardia, Richard Harrow, "el fantasma de la ópera de Atlantic City", decidió vender su alma al diablo por una última vez. Ay, Richard...
El precio de conocer el paradero del cadáver de Jimmy, le obliga a realizar un último recado: meter una bala en el cráneo de Narcisse. Lo que ni Nucky, ni mucho menos Chalky esperaban era encontrarse con un hombre que pese a haber asesinado a 89 hombres en su vida (un buen porcentaje de ellos al final de la temporada pasada en aquella matanza inolvidable), al principio de esta campaña fue incapaz de poner fin al sufrimiento de su perro. Evidentemente había acabado con esta parte de su vida, lo que hace compresible que le pueda la presión de tener que sumar una víctima más. Para su desgracia, es la hija de Chalky y no Narcisse quien acaba sin vida sobre la mesa del Onyx. Momento en el que Richard recibe de su propia medicina y al espectador no le quedaba más remedio que aceptar que no regresaría para la próxima temporada. Todos queríamos un final feliz para su historia. En varias ocasiones pareció tenerle al alcance de su mano, pero por mucho que haya optado por conducir en carreteras secundarias, el camino elegido siempre le hacía regresar a la autopista criminal. Esa de la que muy pocos consiguen salir con vida. Sea como fuere, no se me ocurre mejor forma de despedirle. En el momento adecuado, con todos los cabos atados y sirviendo de broche final para esta cuarta temporada. Richard, sin máscara, bajo el paseo marítimo, imaginándose en el mejor sitio donde podría estar en todo el universo, finalmente encuentra la paz en la muerte que durante tanto tiempo le estuvo rondando. Una secuencia maravillosa que sirve para dejarme sin otro de mis personajes favoritos. Sólo espero que el siguiente no sea Van Alden.
Las guerras no cesan, los cadáveres siguen amontonándose... y Mickey Doyle continúa respirando. Así se las gasta 'Boardwalk Empire' y por eso es tan grande. Dicho todo lo que tenía que decir, ya sólo me queda volver a parafrasear a Margaret con aquello que dijo a Nucky sobre que "el espectáculo debe continuar". Esta vez más que nunca. Lástima que haya que esperar hasta septiembre del año que viene para que se vuelvan a encender las luces de la mejor serie en emisión.
El espectáculo debe continuar en 'Boardwalk Empire'
Publicado por
Diego del Pozo
On
diciembre 11, 2013
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la mejor critica de la cuarta temporada de boardwalk que he leido,no como otras que dicen que la serie lleva tiempo peridendo fuelle.. tienes razon en que no es la mas espectacular y en que no se ha superado respecto a la anterior pero sigue mantiendo ese excelente nivel que la hace ser la mejor serie en emision.
saludos
Akaraperro, me alegro que te haya gustado y muchas gracias por tus palabras.
Me has dejado roto, ¿cómo se puede decir que la serie lleva perdiendo tiempo fuelle? ¿Desde cuándo? Te podrá gustar más o menos pero no esperaba encontrarme con ese argumento.
Para mí, como bien apuntas, sigue manteniendo un nivel excelente que la hace ser la mejor serie en emisión.
¡Saludos!
Es verdad. No se ha superado a si misma, ha evolucionado, agregando más tensiones y nuevos personajes. Pedazo de actores tiene esta serie sobre todo los personajes de Gillian (soberbia) y Narcisse (ole). Buff lo mas duro ha sido perder a richard, un persona interesantisimo.
Saludos
Que gran review, totalmente de acuerdo contigo, es la mejor serie en emisión, muy cerca le anda Mad Men. Los guiones, la fotografía, los actores son simplemente magistrales. Mención aparte merece el gran Richard Harrow, para mi uno de los mejores personajes secundarios de siempre, y seguramente mi favorito ahora mismo. Un placer leerte sobre esta gran serie. Enorme Boardwalk Empire. Saludos.
Para mi la temporada ha sido un coitus interruptus. Anda uno acostumbrado a que Winter se dedique a masticar en exceso las tramas y a partir del octavo capitulo todo sea cuesta abajo y sin frenos. Aqui parecía que iba a pasar lo mismo, pero la intensidad del clímax esta muy lejos de la guerra con Rosseti o la ejecución de Darmody.
A fin de cuentas, y exceptuando a los Darmody todas las tramas quedan abiertas. Recapitulemos:
-Narcisse se presentaba como némesis pero a la hora de la verdad sus duelos han sido en las ligas menores con White y Purnsley. Poca incidencia para el que se suponía quebradero de cabeza para Nucky.
-los federales lo apostaban a Eli Thompson y prometían n final de infarto con esa reunión multitudinaria... Que ni se llega a celebrar. Serán muy importantes a partir de ahora, pero su primer acercamiento ha sido con balas de fogueo.
- Capone ha estado merodeando pero al final, ¿Cual ha sido su trama? Se hace con el poder en ultimas instancias porque Torrio, que ya no tomaba decisiones decide jubilarse. Michael Sannon es demasiado buen actor para el personaje que le toca desde la segunda temporada. Por favor, que hagan algo con Van Alden.
-Eli. La trama de su hijo ha sido la mas obvia y la que menos me ha gustado. Parecía obvio que seria un eslabón débil por donde atacar y asi ha sido. La presión sobre el hermano de Thompson ha estado bien... Pero Nucky jugaba con las cartas marcadas de antemano y nunca se ha visto comprometido. La excelente redención de Eli en la tercera temporada queda en entredicho ahora. Y creo que sigue vivo por no parecerse en exceso al Padrino II.
-y el meollo de la cuestion. Nucky. Al final el personaje de Nucky ha pasado tangencialmente por todos los subargumentos de la temporada pero sin ser capital en ninguno. Se supone que lo de Tampa, o sus Cara a cara con Rothstein desembocarían en algo pero para nada. En las dos ultimas temporadas Nucky vio como intentaron eliminarle. En esta no hay ningún momento de peligrosidad para el. Queramos o no eso va a restar intensidad a la serie.
Del buen hacer de los actores, la ambientación, la fotografía cinematográfica... Esas virtudes son incuestionables y no hace falta ni mencionarlas, que estamos en la cuarta temporada y eso ya entra en la categoría de "se le supone"
y luego se marcan un final tan memorable, tan poético y bien rodado para el personaje mas querido de la historia que... Buff, claro que te queda buen sabor de boca. Te hace olvidar las irregularidades que pueda haber tenido esta temporada que, insisto, para mi existen
Eli, una de las grandes bazas de la serie es que se van grandisimos actores constantemente, pero los que vienen no hacen que se resiente por ese lado. Lo que permite que cada temporada se te caiga la baba disfrutando con un reparto que, seguramente, es el más completo y numeroso (ahí, ahí con Game of Thrones) que hay en la actualidad.
Anónimo, muchas gracias por tu felicitación. Da gusto leer a alguien que comenta así de bien tras la muerte de uno de sus personajes favoritos. Te entiendo perfectamente porque también lo era para mí, o como antes que él, lo fueron Jimmy o Gyp. Así se las gasta Boardwalk Empire. Y por eso es tan grande. Pocas series tienen lo que hay que tener para prescindir de sus mejores favoritos una vez les ha llegado la hora.
El cautivo, la culpa de esas "expectativas" de guerra la tiene el 4x10. Tras ese capítulo era imposible no pensar que volveríamos a presenciar una recta final como los dos años anteriores, pero el 4x11 dejaba bien claro que no iba a ser así. Esta vez tocaba algo diferente.
Cierto es que casi todo queda abierto, de ahí que haya destacado lo de que ha sido una temporada con vistas a futuro. Ahora vayamos punto por punto:
-El problema de Narcisse es que ha sido un problema indirecto para Nucky. Deberían haber sacado más provecho a sus contactos, dado que durante gran parte de la temporada uno no podía saber a ciencia cierta por qué este Doctor era tan importante y poderoso. Cuando se descubrió el pastel quizás ya era un poco tarde. Y tampoco es que haya importado más de la cuenta para el resultado final.
-En cuanto Capone, esta ha sido la temporada de su transformación definitiva para ser el Capone que todo el mundo espera encontrarse. Mientras, Van Alden, creo que a diferencia de las dos últimas temporadas, esta vez sí que se ha aprovechado mucho más de su (todavía insuficiente) presencia. A ver si la temporada que viene sigue subiendo en cuota de protagonismo, sobre todo ahora que va a tener por ahí cerca a Eli.
-A mí también me ha llamado mucho la atención que no hayan puesto el foco de atención en Nucky, pues a fin de cuentas es el protagonista absoluto. ¿Un año de "descanso" para renovar energías mientras pulían sus demonios más humanos y familiares?
-Como tú, de las virtudes de la serie, llegados a este punto, creo que no hace ni falta mencionarlas. Aunque nunca está de más resaltar la joya que es.
¡Saludos!