Al igual que hice con 'Remember Me' hace un par de meses, me dispongo a recomendar otra miniserie de BBC One estrenada el año pasado (el 23 de septiembre de 2014). En este caso, se trata de 'The Driver', también de tres episodios de 60 minutos de duración.

La historia de un hombre ordinario que, por culpa de tomar una mala decisión, acaba metido en una situación extraordinaria. Un taxista que a causa de la frustración con su trabajo y su vida familiar, acepta trabajar como conductor para una banda de delincuentes. Protagonizada por David Morrissey (conocido por su papel de El Gobernador en 'The Walking Dead', entre otros muchos), esta miniserie propone un thriller acerca de la transformación que experimenta un buen hombre, en plena crisis de los 40, dispuesto a hacer lo que sea para escapar de una vida que le está atormentando. Partiendo de esta base, asistimos a un ejercicio de reflexión sobre las consecuencias que tienen las malas decisiones, tomadas en situaciones desesperadas, tanto para uno mismo como para la familia.

'The Driver' cuenta la historia de un personaje muy bien construido y que resulta fácilmente reconocible. Vince Mckee lleva casado 18 años, es padre de una hija adolescente y está a punto de caer en depresión. Tras reencontrarse con un amigo de la infancia, que acaba de salir de la cárcel, termina conociendo a una banda de criminales para los que acepta trabajar en un intento desesperado de dar algo de vidilla a una existencia anodina. Así empieza su descenso (sobre ruedas) a los infiernos. El primer episodio de la miniserie está dividido en dos partes claramente diferenciadas. La primera mitad, dedicada a presentar la situación actual del protagonista absoluto, tanto en casa como en el trabajo, con la intención de poder entender las motivaciones que le llevarán a trabajar como conductor para una banda de criminales. En la segunda mitad, asistimos a sus primeros pasos en su nueva (y doble) vida. Del subidón inicial a los primeros contratiempos del cargo. Y hasta aquí puedo escribir sin entrar en terreno de spoilers.

Ni que decir que, tratándose de una miniserie de BBC, cuenta con una realización impecable, en la que sobresalen las numerosas secuencias que se producen en el interior de un vehículo. Otro acierto de la producción es apostar por desarrollar la historia en un marco deprimente (bastante habitual en este tipo de dramas británicos con pretensiones realistas), en consonancia con la situación insostenible que atraviesa el protagonista. Un thriller que combina a la perfección elementos tanto del drama familiar como del criminal. Por esta razón, pero sobre todo por el perfil de su protagonista, durante su visionado por momentos me aordaba de 'Breaking Bad, pese a que ambos títulos sean totalmente diferentes en cuanto a tono y pretensiones. Eso sí, en 'The Driver', desde el principio, el detonante y la verdadera motivación del antihéroe es sentirse mejor consigo mismo haciendo lo que mejor sabe hacer, aunque también considere a su familia y el factor económico como justificaciones de sus actos. ¿Os suena, verdad? Vince McKee es una especie de Walter White sobre ruedas, sustituyendo la mítica RV por un portentoso BMW y cambiando el desierto de Alburquerque por el asfalto de Manchester.

Por último, apuntar que Showtime está preparando una adaptación para la televisión americana en forma de drama de largo recorrido. A modo de curiosidad, de salir adelante, David Morrissey volvería a ponerse al volante de la ficción. Un caso que recordaría al que recientemente ha protagonizado su amigo David Tennant en 'Broadchurch' y 'Gracepoint'. Sea como fuere, me resulta complicado vislumbrar una serie de varias temporadas partiendo de esta premisa. También es verdad que la historia de Walter White, en un principio, tampoco daba sensación de porder estirarse demasiado y acabó siendo contada en 60 capítulos repartidos en cinco temporadas. Por cierto, hablando de remakes, por si alguien se lo está preguntando, la miniserie no guarda ninguna relación con 'Drive', la fantástica película de 2011 (dirigida por Nicolas Winding Refn, protagonizada por Ryan Gosling y con una banda sonora para el recuerdo), más allá de que ambas historias cuentan con un conductor que acaba al servicio de una banda de criminales.